Caster Semenya

Todas las personas que logran algo importante en la vida tienen algo de excepcional. Estos “raros” son los que se hacen las preguntas que no se hace antes nadie, los que son cabezones y llegan hasta donde nadie ha llegado jamás, los que tienen unas condiciones físicas o fisiológicas excepcionales, los que tienen una capacidad de sufrimiento o sacrifico fuera de lo normal…

Ahora la IAAF juega a ser “Hitler” y decide cuando una mujer es digna o no de ser considerada mujer al nacer con una patología u otra con el beneplácito del TAS, humillando a todas las mujeres, y en mi opinión, a toda la humanidad. Y como no tienen huevos de proclamarse “Hitler” en toda su dimensión, limitan el ámbito de dicha norma discriminatoria
sólo a las pruebas que domina una sola mujer con hiperandrogismo. No limitan los saltos, ni pruebas más explosivas… ni el 3 mil… ni tampoco limitan a un hombre de 190 para que le apliquen algún factor de corrección en sus marcas de 110 vallas respecto, por ejemplo, a un enano como yo de 174.
¡Qué hijos de puta! No es justo, tal vez yo podría haber sido campeón mundial de las vallas altas si hubiesen limitado a esos putos gigantes que son más altos y fuertes de lo “normal”. ¡Qué hijos de puta! No recuerdo las pulsaciones que tenía Indurain en reposo, pero tampoco era “normal”. Resulta que mi amigo Pepito podría haber ganado el Tour de Francia. ¡Que le quiten los 5 Tours! (o lo que sean)

Vamos, una vergüenza de resolución.

Aliston Browlee no es un héroe

Este no es un post en contra de los hermanos Browlee, para nada, los respeto muchísimo y son junto con Noya los primeros tipos que demostraron que se pueden hacer triatlones haciendo los tres segmentos a un primer nivel por igual. De hecho, ellos tres lo han convertido en una necesidad para poder ganar en los triatlones olímpicos. Así que como decía un amigo mío: respect!

Pero me revientan los comentarios que veo al respecto en las redes sociales cuando lo acontecido no es más que una gran irresponsabilidad, aunque sea de un gran campeón y seguro que de forma inconsciente.  Un golpe de calor, una deshidratación severa, pueden causar la muerte de una persona. 

Los medios, y sobre todo los deportivos, aparte de informar deberían de concienciar a los miles de personas que afrontan un ironman, un ultra, un maratón, etc…, que estas acciones deben evitarse a cualquier precio. Deberían, de hecho, utilizarlos como ejemplos palpables para explicar lo que no se debe de hacer.

Mejor nos iría todos que explicasen cómo actuar correctamente cuando el tipo de cuarenta y pico de años que está a tu lado revienta en el kilómetro 41 de un maratón. Ya me veo a alguien llevándolo a empujones y gritándole en plan Oficial y Caballero en lugar de atenderlo como Dios manda.

Aliston ha hecho bien en pararse, por supuesto, pero no en llevárselo a rastras. Tumbarlo, darle toda el agua del mundo que había en ese avituallamiento, écharsela por todo el cuerpo, pedir un médico a gritos… eran opciones válidas. Supongo que si a Jonathan le hubiese dado un infarto durante esos pocos metros finales Aliston se preguntaría toda su vida porque nadie nunca le explicó lo que no debía hacer.

Puede que algunos se están frotando las manos pensando en el aumento de fichas o inscripciones que supone vender héroes y machadas en lugar de tirarse de los pelos porque se hubiese podido morir un triatleta en directo.

O a lo mejor soy yo el único idiota que piensa que retirarse es una opción mejor que palmarla y no poder calzarte las zapatillas el lunes siguiente al anochecer.

Drámatico final en la final de las Series Mundiales. Cozumel, 2016.

Ciao Borzakovski

Yuri Borzakovski ha anunciado su retirada a los 33 años.

Uno de los atletas más rápidos de la historia del 800m, con sólo 20 años corrió en 1'42,47 y 3 años más tarde se proclamó campeón olímpico en Atenas 2004.

Tal vez haya sido el atleta con los mejores 200 metros finales de la historia.

Ciao.

Bruselas 2001

Atenas 2004

Monaco, diamond league 2014, espectacular.

Un chorro de marcas, eso es lo que fue.

Espectaculares marcas el viernes pasado en Mónaco. Se corrió muy rápido. Mucho.

En medio fondo espectaculares 1500 ganados con 3'27 y con 7 tipos bajando de 3'30 y un 800 masculinos con 5, sí, 5 tipos en menos de 1'43. Y de nuevo, ojo con el francés Bosse. Está fuertísimo y esta vez vestido de atleta :-). El 800 femeninos no se quedó atrás ni mucho menos, con las dos primeras bjanado de 1'58 y las ocho primeras bajando de 2'.

En velocidad marcones en el 200 masculino y el 100 femenino. Gatlin en 19"68. Impresionante, sobretodo por los errores técnicos a falta de 50 o 60 metros. Está fortísimo. Cualquier otro se hubiese caído o roto. 10"80 para la americana Bowie (si es que das una patada en US…)

Vallas: Supermarca del Francés Martinot: 12"95. Sinceramente, creo que los vallistas son los más bestias de la pista, hay que ser un titán o no tener cerebro para ir a esa velocidad pasando vallas a casi 1,10 de altura. Es una prueba que merece ser vista en directo, en la pista, para realmente apreciar lo que hacen estos animales.

Todo esto deja un salto de 1'40 en altura como si nada… como los chavales están que se salen desde hace 1 mes, pues ya no es noticia.

Y sin ninguna puta televisión para poderlo ver en directo (o yo no me he enterado, vamos, que también podría ser). Algunos de los vídeos a continuación. Todos son enlaces de youtube, así que si alguno deja de funcionar a joderse y a protestar a Teledeporte o cualquier otro.

1500 M

800 M

800W

200 M - 19"68!!

100 W

110 M - Putos Titanes!

¿Por qué corres?

Ayer en cada kilómetro que pasaba en cada uno de los dos 4 miles que realizamos, el cansancio se acumulaba lentamente pero me sentía cada vez mejor…

La verdad es que hay días, bueno en realidad momentos puntuales durante determinados entrenamientos o competiciones, en los que cada zancada me supone un placer infinito. Es una sensación extraña y tampoco me sucede muy a menudo. Correr me gusta, siempre me gusta, pero estas sensaciones son un no sé qué diferente.

Hoy después de ver un video precisamente sobre el entreno de ayer y leer los múltiples comentarios que la gente hacía sobre él me ha venido de repente a la cabeza la pregunta que siempre nos hacen multitud de veces, ¿Por qué corres?

Mi respuesta normalmente siempre ha sido bastante llana y simple: Porque me gusta, igual que a uno le gusta un plato de paella y a otro uno de callos, o a uno le gusta el chorizo y a otro no. Y al igual que la gente no da respuestas filosóficas para explicar esas cosas pues tampoco yo la doy para correr. Corro porque me gusta y por supuesto porque me sale de los huevos (esto último lo añado según el interlocutor y mis ganas de provocar… o sea, casi siempre.)

De hecho siempre me han parecido una cursilada todas estas respuestas filosofando sobre algo tan simple y sencillo como correr, y mitificarlo me parece algo totalmente sin sentido. Porque correr es una cosa simple y sencilla que se hace desde hace miles de años y punto.

Pero debo de haberme ablandado y la verdad es que no me he dado cuenta y me he sorprendido a mí mismo filosofando sobre ello. ¿Cómo podría no dar una respuesta tan borde la próxima vez?, ¿Tengo realmente motivos para correr?, Y si los hay ¿Podría explicarlos? Y si intento hacerlo, ¿Me entenderá alguien que sólo haya corrido en su puta vida para cruzar un semáforo en rojo? ¿y me entenderán los que sí corren? (puede que ni ellos).

Y me ha dado por ahí... y al final me he dado cuenta de que corro por un simple acto de egoísmo. Corro por mí y por nadie más.

Corro para poder añadir una colección de instantes personales conmigo mismo que soy totalmente incapaz de explicar con palabras pero que me producen una felicidad infinita, y corriendo, aunque muy pocas veces, lo consigo. No tiene porque estar relacionado con la competición, ni con la velocidad, ir más rápido o más lento, más lejos o más cerca, ni con superar un reto o mis marcas, aunque a veces sí. Pero el único denominador común de todos estos instantes ha sido y es: estar corriendo.

Estos instantes son tan únicos que se me quedan grabados para siempre en la memoria. Llevan asociados ciertos días que recuerdo con cariño y me ayuda a recordar con especial cariño a la gente que estaba justo al lado corriendo al mismo tiempo (si es que había) cuando pienso en ese día también…

Estos instantes a veces los consigo haciendo otras cosas en la vida, por supuesto; mirando a los ojos fijamente a una persona durante minutos sin cruzar una palabra, tomándome un décimo gin tonic con un amiguito cargado de buenas o malas inenciones, durante el tiempo que he tardado en cobrar una buena pieza pescando,... pero aquí hablamos de correr y de tonterías similares. 

Y ayer, otra vez (torna, torna-hi), el último mil me gustó tanto que creo que voy a rescatar mis viejas zapatillas de clavos y llevarlas en el coche perennemente para volver a correr con ellas en el próximo entreno similar (aunque sé que no debería y tampoco creo que me dejen hacerlo, ¿o sí Mr. Muñoz? ). A ver si así puedo acumular otro instante de felicidad volviendo a dar 2 vueltas y medía más rápidas todavía pero escuchando los chasquidos de los clavos porque el viejo tartán está destartalado, aunque me importa una mierda el tartán, porque estaré corriendo.

 ¡Ah, y sigo corriendo porque me sale de los huevos!

Technical Knockout

A technical knockout (also referred to as a T.K.O.) is declared when the referee, official ring physician, the fighter, or the fighter's cornermen decide that a fighter cannot safely continue the match.

Así me quedé sentado en una hamaca durante 1 hora mirando la tormenta perfecta desatada en el mar de Paguera. Nadar hubiese sido un acto de suicidio colectivo y de esta manera se esfumaba cualquier ilusión. Acababa de perder el combate sin lucha alguna y sin ninguna segunda oportunidad. Caer al suelo sin pelear me destruyó todos los esquemas. Simplemente desolador.

Toda la semana había sido un infierno por motivos que no pienso mencionar y habían hecho desvanecer la ilusión que tenía, así pues cuando el viernes todo se solucionaba de manera inesperada ésta volvió con más furia y tenía más motivos que nunca para celebrarlo. Tal vez eso hizo que la caída fuese más dura todavía.

No sé cómo expresar lo siguiente, ojalá supiese escribir bien y mejor; El único consuelo que tuve me lo dio mi mujer, Ana, que me abrazó con suavidad como a un niño y con un susurro me dijo literalmente no pasa nada, habrá más, el año que viene haremos otro y de esta forma pude por fin llorar para sentirme más tranquilo después.

En realidad lo importante no es hacer un Ironman o chorradas así, lo realmente importante es poder hacer cosas juntos. Y dijo “haremos”, y dijo bien porque sin ella sería imposible plantearme ningún reto de ninguna índole.

Eso sí, sigo siendo un puto cabezón. Y el mismo sábado volví a cenar de pasta y pollo, sin ningún tipo de salsa, ni condimento, ni ná. Me comí los putos restos de los 2 días anteriores, la misma jodida dieta. ¿Para qué? Pues para romper varios juramentos hechos el mismo viernes; no volveré a comer esta porquería insípida en meses, no volveré a levantarme temprano en fin de semana en las próximas 5 o 6 semanas… y para presentarme el domingo por la mañana en Alcudia aún a riesgo de no poder inscribirme y hacer mi mejor marca en media maratón con 1h24’59”. 

Esta marca sí que se la dedico a mis compañeros de mallorcatraining.com y al sr. Ivan Muñoz.

Caparrut com un porc de llet, idò!

y 

¡Qué bello es el deporte!

Punto final.

Daddy.

Last video of this season with all my sense...

Alea jacta est

Pues sí amiguitos, la suerte está echada.

Ya no hay nada que pueda hacer aparte de descansar, comer bien e hidratarme durante esta semana. Cosa que no siempre es posible ya que de momento estamos a martes y llevo 2 días mal encaminados, y puede que duré algunos días más.

Ya sólo tengo ganas de que llegue el momento de la salida, tirarme al agua, entrar en mi propio trance particular y disfrutar cada minuto y cada hora. Disfrutar incluso del sufrimiento y seguir, seguir y seguir más.

Tengo el nerviosismo de típico de un niño que pasa del cole al instituto. ¿Será lo mismo? ¿Habrá sensaciones nuevas? ¿Qué me espera? Le tengo un respeto enorme al sector de la bicicleta, pero sinceramente, ya he recorrido esa distancia 2 veces en menos de 1 mes. Con gente, vale, pero 2 veces cojones. Aún así las dudas están ahí; ¿sabré comer y beber bien?, ¿acertaré como en los entrenos?, ¿me dolerán igual las piernas todo el rato, sólo al final o podré asimilar la distancia con mejores sensaciones de las que espero? Las sensaciones de los entrenos están muy bien, pero señores, llevaba tanta carga que me dolían las piernas desde el mismísimo puto kilómetro 1. ¡Qué coño, si ya me dolían al bajar las escaleras al parking al ir a buscar la bici! . Y lo que no sé es si terminaré mejor o si al fin y al cabo al se termina igual de jodido.

Así que tal vez sea porque no soy muy ciclista pero para no volverme loco estos días estoy intentando reducir la prueba a ¿cómo estaré a los 10km de la maratón?, ¿cómo estaré en el 21?, ¿llegaré al 30 sin pararme? y si lo hago; ¿tendré cojones de no parar hasta el final? Eso sería muy grande. Pero todo eso suponiendo que seré capaz de correr.

Y combinando todas las posibles respuestas salen miles de carreras distintas… oohhhhhhh y también está el tiempo. J

Así que ahora lo dicho, me quedan 3 días de calma. Lo siento por mis colegas pero todos los consejos que me puedan dar de aquí al día D se van a ir ya a la basura (al menos para esta prueba), porque tengo mi plan y no voy a cambiarlo bajo ningún concepto. Así que la cagaré o no, pero eso es lo que más me excita.

Son tiempos nuevos, tiempos salvajes y de lucha solitaria. Así que nos vemos el lunes que viene en psiquiátrico.

Daddy.

Ilegales, el día que cumplimos 20 años.